Más de 200 personas se manifestaron ayer a la tarde por las calles de Mar de Ajó como consecuencia del cierre del casino de la vecina ciudad costera de Mar de Ajó, y en rechazo a las medidas anunciadas por el gobierno bonaerense, que incluyen el cierre de salas de juego (Necochea, Valeria de Mar, y Mar de Ajó) y la licitación de más de 3.800 máquinas tragamonedas.
Con honda preocupación los empleados del casino de Mar de Ajó se manifestaron junto a vecinos y turistas sobre el cierre en forma imprevista del casino, dejando tres bingos privados abiertos que son de propiedad del operador político Daniel Angelici, que hace pocos días fue beneficiados con la eximición de pago de ganancias. Dentro de las consignas los trabajadores piden rever la medida teniendo en cuenta que se reubicados, también sería una falacia, ya que el Casino Central de Mar del Plata, o debería achicar las horas de sus trabajadores actuales, por lo tanto rebaja del salario, o de los 40 empleados que deben ser trasladados, algunos podrían perder su fuente de trabajo. Este mismo caso pasa con los empleados del Casino de Necechea, ya que incrementar 70 empleados, en el casino de Miramar, se sabe a ciencia cierta, que esa cantidad de puestos de trabajos son un número más que importante para el casino de la “Ciudad de los Niños”.
La Gobernadora Vidal realizó toda una puesta de escena hablando de la restricción del juego legal, y combatir el ilegal, sin embargo como viene sucediendo casi en forma sistemática, la variable de estas medidas son los trabajadores del sector público, como es lo que ya sucede con la disolución de la UEP, y como pasa con la TV Pública a nivel nacional. Mientras tanto los bingos siguen funcionando y son del orden privado, si quiere realmente restringir el juego legal, debería haber empezado por la cantidad de bingos que hay en la Pcia. de Bs As. La pregunta es ¿porque la “Leona” no lo hizo?, la respuesta la tiene solo ella o ¿Angelici?.
