En operativos de control realizados en Mar del Plata, Miramar, Balcarce y General Madariaga, la distribuidora de gas Camuzzi detectó medidores adulterados y conexiones clandestinas a la red de gas natural.
La empresa advirtió que estas prácticas, además de constituir un delito, representan un grave peligro para la seguridad de las familias que utilizan el servicio de manera reglamentaria en las zonas afectadas.
Las irregularidades fueron identificadas durante las tareas habituales de fiscalización de la distribuidora y mediante denuncias realizadas por vecinos. Según Camuzzi, estas manipulaciones indebidas, realizadas en muchos casos con materiales no reglamentarios, sin dispositivos de seguridad y sin intervención de personal calificado, aumentan significativamente los riesgos de fugas de gas, incendios y explosiones, comprometiendo la confiabilidad de la red.
La empresa subraya que estas prácticas no solo ponen en riesgo a la comunidad, sino que también generan inequidad frente a los usuarios que cumplen con el pago de sus facturas. “El robo de energía está tipificado como delito en el Código Penal e incluso puede implicar pena de prisión”, alertó Camuzzi.