Por Pablo Menéndez.- En este nuevo aniversario de Miramar, recordamos a Segundo Martín Acha, autor de “100 años de anecdotario histórico de Miramar: 1888-1988”, una obra que rescató con sensibilidad y claridad la memoria colectiva de nuestra ciudad.
En 1996, Don Segundo publicó su libro “100 años de anecdotario histórico de Miramar: 1888-1988”, que rápidamente tuvo una segunda edición en el mismo año. Con paciencia y pasión, recopiló anécdotas que hoy constituyen un verdadero tesoro para quienes amamos esta ciudad.
En sus páginas, nos dejó reflexiones que siguen vigentes. Con visión amplia y profunda, escribió:
“En la vida —en toda vida— pareciera estar todo determinado por una ley inexorable: la que establece el principio y el fin de todas las cosas; su comienzo y su terminación; su nacer y su morir. Nada hay perdurable en el transcurso del tiempo, ya que éste no puede ser alterado por presiones ni por súplicas. (…)
Para que el recuerdo de un hombre se prolongue y su memoria se proyecte más allá de la existencia material, es necesario que las obras realizadas por él conserven encendida la llama del recuerdo, mostrando a las generaciones que lo siguen el ejemplo de haber servido a la comunidad.“
Ese mensaje nos interpela hoy más que nunca. En tiempos donde muchas veces predominan el egoísmo, lo autorreferencial y la crítica vacía, las palabras de Acha son una brisa fresca: nos recuerdan que Miramar tiene riquezas, potencialidades y una esencia que merece ser defendida y potenciada.
Este aniversario nos invita a recuperar el espíritu de quienes, como Segundo Acha, trabajaron con entrega y sentido comunitario. Que su legado sea guía para dejar atrás la queja permanente y sumar propuestas que nos ayuden a construir juntos la ciudad que soñamos.