En la sesión especial de este lunes 6 de octubre, el Concejo Deliberante aprobó la adjudicación de 33 unidades fiscales y servicios mixtos en la Costanera de Miramar, un paso importante para ordenar y proyectar el frente costero de la ciudad.
El expediente fue acompañado por el bloque Unión por la Patria, con el apoyo del concejal radical Fabián Barberini, mientras que Viviana Farías (PRO) y Uriel Mespulet (La Libertad Avanza) votaron en forma negativa. En tanto, los cinco concejales de Juntos por Alvarado optaron por la abstención.
Cada voto expresa una mirada sobre el desarrollo de Miramar. La adjudicación no solo define nombres o concesiones: también implica trabajo, inversión y compromiso de vecinos que decidieron apostar por la ciudad. En tiempos donde la iniciativa privada local sostiene buena parte del movimiento económico, acompañar ese esfuerzo debería ser una prioridad.
Las diferencias políticas son parte de la democracia, pero cuando las decisiones impactan directamente en la vida de los vecinos y en el futuro del distrito, el consenso no debiera ser una excepción, sino una señal de madurez institucional.
Porque construir ciudad también es eso: animarse a decidir pensando en todos.
Por Pablo Menéndez
Director elrecado7607.com