Además de evaluar confluir con el tigrense y con Stolibizer, también aceptaría sumar a Martín Losteau y los socialistas de Santa Fe. Pusieron límite a los “procesados y a los condenados”.
El almuerzo entre Sergio Massa y Florencio Randazzo era el dato que faltaba para confirmar definitivamente que era una semana clave para el peronismo. Si bien el tigrense venía con perfil bajo, más expectativa generaba “El Flaco”, quien con este encuentro parece haber pulverizado las posibilidades de confluir en la “unidad” que promueven sus excompañeros de ruta en el PJ y el kirchnerismo.
Para que no queden dudas, Massa y Randazzo pusieron como límite para la construcción a futuro la imposibilidad de sumar a dirigentes “procesados o condenados”. Más allá de los tecnicismos judiciales, el mensaje le cierra la puerta a una alianza con, por ejemplo, el espacio que lidera Cristina Kirchner.
Mejor día no podrían haber elegido para dar una señal: casi en paralelo, en San Antonio de Areco, intendentes de Unidad Ciudadana recibían a la nueva conducción partidaria, Gustavo Menéndez y Fernando Gray, para buscar puntos en común. Luego la encontrarían: la oposición al pacto fiscal que promueve Vidal.
La conversación tuvo lugar durante casi cuatro horas en un restaurante del barrio porteño San Telmo, mientras comían pescado y ensalada. No todo fue política. Como sucede cuando se reencuentran dos viejos amigos separados por un percance, se pusieron al día sobre temas personales, esposas, hijos y padres.
El otro dato importante que arrojo el mitin fue que Randazzo no ve con malos ojos la posibilidad de que, llegado el momento, un arreglo con Massa incluya también a Margarita Stolbizer. La dirigente de Morón estaba avisada del movimiento que iba a dar su aliado y también prestó su consentimiento. También se mencionó a Martín Lousteau y a “los socialistas de Santa Fe”.
El eje principal de la charla, no obstante, fue la situación económica del país, sobre la cual ambos hicieron el mismo y negativo análisis. Ese fue el round de estudio; y como hubo coincidencias fuertes, avanzaron con lo demás. En ese camino, se encontraron al cuestionar la suba de tarifas, la “pérdida” de empleos industriales y la situación “crítica” de las Pymes.
Más allá de la foto –que en realidad no existió, lo que es un dato para entender los crudo que todavía está todo-, se propusieron empezar a explorar la idea de armar “equipos” para generar una alternativa y darle a la sociedad una “luz de esperanza”. El comienzo podría ser “pensar juntos” herramientas “novedosas” para “promover dirigentes nuevos”
No faltó la autocrítica y el repaso de los errores que los llevaron a quedar muy relegados en la última elección y hoy alejados de las opciones mayoritarias del justicialismo. No obstante, por ahora es todo muy incipiente y hasta se supo que Massa está abocado a armar su estudio jurídico.
Queda por ver si este reencuentro tendrá alguna consecuencia política en lo inmediato. A nivel bonaerense, Randazzo no tiene legisladores ni intendentes que le respondan; sí un grupo de concejales distribuidos por el interior. Quizá pueda haber algún reacomodamiento en el Congreso aunque el poder de fuego del exministro de Transporte también es bastante relativo.(Fuente infocielo.com)