Sigue con su Renault Clío, en el que desanda rutas de la provincia para acercarse a las distintas comunidades. Reorganizó su hoja de ruta

Hace apenas diez días estuvo acá nomás, en Santa Clara del Mar. En el mismo día había pasado por Villa Gesell, Pinamar y General Madariaga. Y en la tarde previa había hecho escala en el Partido de la Costa. Sin pausa viene la agenda de Axel Kicillof, el candidato a gobernador por Frente de Todos que imprimió un giro a su hoja de ruta para llegar a tocar los 135 distritos bonaerenses antes de la elección general del próximo 27 de octubre.

No es que le quede por recorrer todos sino llegar aunque sea una vez a los que le faltan, que son 20 y distantes entre sí. Sus colaboradores tomaron el mata, la red vial y ahora decidieron dividir en dos cada semana para organizar mejor estas recorridas de campaña.

Los bolsos se arman el miércoles por la noche, porque jueves y viernes serán días de recorrer cientos, a veces miles de kilómetros en un mismo día. El inicio de la semana se reserva a escapadas cercanas a la Capital Federal para que el diputado pueda estar cerca del epicentro de las decisiones políticas y partidarias, que demandan reuniones múltiples después de cada domingo de descanso.

Quedan poco más de 40 días para seguir sumando adhesiones, con contactos con la gente, charlas y actividades de campaña en los distintos rincones de la provincia. De lunes a miércoles se moverá en la zona norte, aquella que no le depare más de una o dos horas de viaje. Ida y regreso apenas terminada la actividad es la consigna.

En el clásico Renault Clío con el que se movió en campaña previo a las PASO afronta esta segunda etapa de su proyecto para gobernar la provincia de Buenos Aires. Tras el 11 de agosto el auto pasó por el taller, afrontó tareas de mantenimiento y ya está de nuevo en las rutas.

Con más del 50% de los votos y una diferencia de casi 20 puntos sobre la gobernadora María Eugenia Vidal, Kicillof se mueve con tranquilidad pero sin relajarse ante un resultado que parece asegurarle un triunfo en seis semanas.

Enfocará aquellos distritos en los que su principal competidora estuvo más firme y lo derrotó. General Pueyrredon es uno de ellos, aunque la diferencia entre ambos candidatos fue mínima.

Kicillof está buscando acercarse a los sectores que le han resultado algo más esquivos a su propuesta. En la última semana, por ejemplo, tomó contacto con referentes del campo, que arrastran una historia de desencuentro profundo con el kirchnerismo./Fuente ahoramardelplata.com